No rematamos la faena
Todo los pericos tuvimos la sensación al marchar del campo de Cornellà-El Prat que se habian perdido 2 puntos. Tan solo sobró un minuto para los resultadistas y faltó rematar la faena, para los más amantes del futbol control. Pero lo que ayer pasó, fuera lo que fuera, fué una pena.
Desde el inicio, el Espanyol comenzó a dominar con juego al Valadolid, y fruto de ello es que en los diez minutos ya llevaban 3 corners lanzados. Oportunidades claras como las de Callejón e Iván Alonso no se materializaron. Las bandas con un Marqués explosivo, el movimiento de los jugadores de Pochettino y la triangulación, desbordaban a un Valladolid a la defensiva. Pero la primera parte acabó sorprendentemente 0-0.
Ya en la 2ª parte, poco después de comenzar, el Espanyol seguía atacando sin cesar y llegó la recompensa a tanta insistencia. En el minuto 50, un pase magistral de Marqués a Luís García, lo aprovechaba el asturiano para batir al meta pucelano y poner el meritorio 1-0 en el marcador de Cornellà-El Prat.
A partir de ahí el Espanyol se fué diluyendo como un azucarillo en el café y el Valladolid, poco a poco, con cambio de hombres fuertes en el mediocampo, fué comiendo terreno y dominio a los de Pochettino que veian que perdian terreno. Pochettino quiso oxigenar el mediocampo y la delantera con cambios como Verdú por Baena o Marqués por De la Peña, pero el efecto fué que el ataque perico se anuló completamente. Con la entrada de Medunjanin, el Valladolid que a base de chuts a balón parado empezaba a creer en el empate, hizo que en un cuarto de hora, el jugador pucelano de origen bosnio estrellara un palo en una falta cercana al área grande. Más tarde, en un error de Forlín y de toda la defensa perica, conseguiría de fuerte chut el gol del empate a falta de segundos para cumplir el descuento. Una pena, lo que ya deciamos.
Las notas positivas del partido son que Luís rompió una racha de 10 partidos oficiales sin marcar y que llevamos 7 partidos sin perder seguidos sin contar el partido de ida de la Copa del Rey.
Desde el inicio, el Espanyol comenzó a dominar con juego al Valadolid, y fruto de ello es que en los diez minutos ya llevaban 3 corners lanzados. Oportunidades claras como las de Callejón e Iván Alonso no se materializaron. Las bandas con un Marqués explosivo, el movimiento de los jugadores de Pochettino y la triangulación, desbordaban a un Valladolid a la defensiva. Pero la primera parte acabó sorprendentemente 0-0.
Ya en la 2ª parte, poco después de comenzar, el Espanyol seguía atacando sin cesar y llegó la recompensa a tanta insistencia. En el minuto 50, un pase magistral de Marqués a Luís García, lo aprovechaba el asturiano para batir al meta pucelano y poner el meritorio 1-0 en el marcador de Cornellà-El Prat.
A partir de ahí el Espanyol se fué diluyendo como un azucarillo en el café y el Valladolid, poco a poco, con cambio de hombres fuertes en el mediocampo, fué comiendo terreno y dominio a los de Pochettino que veian que perdian terreno. Pochettino quiso oxigenar el mediocampo y la delantera con cambios como Verdú por Baena o Marqués por De la Peña, pero el efecto fué que el ataque perico se anuló completamente. Con la entrada de Medunjanin, el Valladolid que a base de chuts a balón parado empezaba a creer en el empate, hizo que en un cuarto de hora, el jugador pucelano de origen bosnio estrellara un palo en una falta cercana al área grande. Más tarde, en un error de Forlín y de toda la defensa perica, conseguiría de fuerte chut el gol del empate a falta de segundos para cumplir el descuento. Una pena, lo que ya deciamos.
Las notas positivas del partido son que Luís rompió una racha de 10 partidos oficiales sin marcar y que llevamos 7 partidos sin perder seguidos sin contar el partido de ida de la Copa del Rey.
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